

Desde niño, pasaba horas hojeando antiguos libros y revistas ilustradas que teníamos en casa. Intentaba imitar las técnicas que veía, usando cualquier papel y material a mano: lápices, bolígrafos, rotuladores, y con el tiempo, plumillas, tinta china y papel de calidad. Estudié diseño industrial en Palma y posteriormente obtuve una beca para estudiar diseño de muebles en Londres. Durante un tiempo, trabajé en diseño de producto y branding, pero la necesidad de volver a dibujar me llevó a enfocar mi trabajo hacia la ilustración.
Una etapa decisiva fue la selección de algunos de mis trabajos en el libro 200 Best Illustrators de Luerzer, lo que abrió puertas a encargos destacados, como los de Sony Pictures y Red Bull.


En los 80, durante mi adolescencia, mi obsesión era alejarme de Mallorca. Sin embargo, a principios de los 90, tras un tiempo fuera, tuve la oportunidad de trabajar en ForaVila, un estudio pionero en Sóller, donde crecí profesionalmente y aprendí que era posible trabajar desde la isla para un mercado global, gracias a la tecnología. Hoy en día, Mallorca representa mis raíces culturales, el lugar donde han crecido nuestros hijos y donde está nuestra familia. Al mismo tiempo, la isla nos ha permitido desarrollar proyectos a nivel internacional, fusionando lo local con lo global.
Ignoro si tengo un estilo definido. Me gusta adaptarme a las necesidades de cada proyecto, empleando diversas técnicas: desde lápiz y acuarela, medios digitales, 3D hasta inteligencia artificial. Esa flexibilidad me permite abordar una gran variedad de proyectos.
Recientemente he colaborado en proyectos de animación, y ver cómo mis ilustraciones cobran vida ha sido fascinante. Es un camino que deseo explorar más en el futuro.



Lo que más me motiva es el reto que supone cada encargo. Cada briefing es diferente y siempre aporta algo nuevo que aprender, lo que hace que el proceso sea muy enriquecedor. Me resulta difícil apreciar con perspectiva qué papel juega Mallorca en mi trabajo ya que inevitablemente formo parte de ella: el Mediterráneo, sus rasgos culturales, su ritmo, su luz y sus colores, que seguramente dejan huella en mi trabajo.
Las ilustraciones que realicé para los calendarios de Bazaar Palma, centrados en Mallorca, reflejan una visión íntima y evocadora, con un enfoque personal que remite a recuerdos de una isla más tranquila, auténtica y alejada de la masificación.
Principalmente, trabajo en ilustración editorial, packaging, publicidad, branding y diseño de producto. He tenido la suerte de colaborar con firmas como Sony Pictures, Bulgari, Bentley, Dior, Louis Vuitton, El País, Forbes, Mondadori, Phaidon, Rizzoli, Condé Nast, Hearst y Die Zeit. También con agencias como TB-Atelier, Mandarina Brand Society, Signne y Aducci, además de marcas locales como Bazaar Palma, Durán, Freer Living, Nicolás Joyeros, Forum Shop y Cap Rocat. He ilustrado colecciones de moda para revistas de alta costura y he participado en proyectos de branding y packaging para Codorniu y Damm. En mi web y redes sociales puedes encontrar la mayoría de estos trabajos.
Recientemente, he ilustrado el libro conmemorativo del 75º aniversario de la Commonwealth, en colaboración con St. James’s Publishing House, y también diseñé la imagen del Palma International Boat Show. Además, acabamos de presentar un proyecto de branding muy especial para Charles Marlow & Bros.
Creo que ya estoy viviendo ese sueño: poder trabajar cada día en lo que más me apasiona, rodeado de personas y proyectos que me motivan, desde un lugar que siento como propio.
